Estás esperando con ansias aquel día del calendario que marcaste en rojo, aquel pequeño recuadro con un gran número y que está seguido de la palabra: vacaciones. Dos semanas de no saber nada del trabajo, de no atender el teléfono, de desconectarte por completo y disfrutar.
Todo está fríamente calculado, los lugares a visitar, hasta qué hora dormirás, en qué emplearás tu tiempo, ningún detalle se te ha escapado para hacer de esos 15 días, los mejores.
Pero ¿te has puesto a pensar lo que será cuando regreses? Lo que será volver a tus funciones, retomar la rutina de despertar, ir a la oficina, atender tus pendientes.
Para que no seas víctima de lo que se conoce “clínicamente” como el Síndrome Postvacacional, LED te presenta una serie de recomendaciones a tener en cuenta para volver a tu trabajo.
- Programa el regreso: No hagas lo que los demás y date unos días previos para asimilar el volver al trabajo. Tómate un par de días para retomar tus funciones, para regresar a la rutina.
- Aborda tus labores progresivamente: Prioriza los pendientes que dejaron las vacaciones y comienza por lo más sencillo para que vayas recordando el ritmo.
- Respeta las horas de sueño: Si eres de los que trasnocha demasiado cuando está libre, utiliza los días previos para regularizar tus horas de sueño.
- Modera el consumo de alcohol: No te decimos cómo divertirte, solo las medidas que puedes tomar para que el volver a la oficina no te caiga como un baldazo de agua fría. Un breve recordatorio: el alcohol agrava los síntomas de apatía, depresión y astenia; el café, agudiza el estrés.
- Ejercítate: No hay mejor manera de liberarse del estrés que haciendo ejercicio, lanzándose a la aventura de hacer deporte. Además de ayudarte a liberar endorfinas, responsables de hacerte sentir feliz, optimista y relajado.
- Organízate: Está bien tener un tiempo para el trabajo, pero ahora que regresas a tus labores, date un tiempo para algún hobby, un momento del día que te ayude a desconectarte y a combatir la ansiedad y el estrés.
- Ponte límites: Repite: “debo aprender a decir ¡no!, debo aprender a decir ¡no!” Asimismo, ponte límites, y ponle límites a quienes te exijan inmediatez en labores cuando estás en proceso de retomar tu trabajo. Recuerda, haz cada cosa a su tiempo.
- Sé paciente: No con los demás, contigo mismo. Has regresado luego de descansar dos semanas, es lógico que te sientas lento, ligeramente perdido y hasta estresado por la rutina. Por ello, ten paciencia y no desesperes, retomarás el ritmo cuando menos te lo esperes.
Si sientes que te pierdes en el recuerdo de los días libres, los viajes y las salidas durante la semana, solo recuerda que esa nostalgia es pasajera y que tú la dominas. La clave está en saber ordenarte para que el cambio de días libres a laborables, no sea muy brusco.
Comentarios: 8 tips para evitar el síndrome postvacacional